¿Hace mal el aspartamo?

El aspartamo es un edulcorante bajo en calorías que se elabora combinando químicamente dos aminoácidos: el ácido aspártico y la fenilalanina. Es un aditivo alimentario, y como tal ha sido sometido al riguroso control de seguridad de los comités científicos de todos los países donde se lo usa, y basado en estudios científicos en los que se analiza cómo el organismo lo asimila, qué efectos tiene en el cuerpo, cuánto se puede consumir por día, etc.

El aspartamo ha sido declarado apto para el consumo de toda la población, incluidos los diabéticos, las mujeres embarazadas y en período de lactancia, y los niños, en más de 90 países, y por organismos de control como el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios y la FDA (Administración Estadounidense de Alimentos y Medicamentos). Los únicos que deben controlar el consumo de aspartamo son las personas que padecen fenilcetonuria, una enfermedad hereditaria poco común. Por eso los productos endulzados con aspartamo deben indicar en la etiqueta que contienen fenilalanina, con lo que el consumidor tomará su decisión con toda libertad y pleno conocimiento de causa.