¡Es un híbrido!
¿Sabías que las plantas se "deprimen? Y a partir de esta depresión, se genera vigor. Este es el caso de las semillas híbridas, donde los hijos manifiestan mayor vigor que los padres y, por lo tanto, rinden más, tienen mejor sanidad y otras características. Comemos híbridos muy a menudo, quizás los que más conocemos son los de maíz o girasol, pero también hay de tomate, remolacha y muchas otras hortalizas que tenemos a diario en nuestras mesas. Te contamos en este artículo qué es un híbrido y en qué consiste esta técnica para mejorar nuestros alimentos.
Depresión
Cuando una planta de polinización cruzada (como el maíz, por ejemplo) se autofecunda muchas veces sufre depresión por endogamia. Esto hace que la planta sea más débil y menos fértil.
Vigor
Por otro lado, cuando se cruzan dos plantas que se han autofecundado, la descendencia es vigorosa, sana y fértil; es decir, mejor que los padres que le dieron origen. A esta generación de plantas se la denomina híbrida y a esa expresión de vigor se la conoce genéticamente como heterosis. Como ese vigor híbrido solo dura una generación, los productores deben comprar la semilla híbrida cada campaña agrícola.
Complejo
En la producción de híbridos vamos de la depresión al vigor y también nos topamos con el complejo. En este caso no es un complejo existencial sino de producción. La autofecundación para obtener parentales homocigotas es compleja, ya que las plantas van perdiendo vigor y fertilidad a medida que avanza la endogamia y son difíciles de mantener. Luego, en la producción de semilla hay que tener cuidado de quitar todas las flores masculinas en las líneas hembra para la producción de híbridos de buena calidad.
Producción de semilla híbrida de maíz en 3 pasos
1. Producción de líneas parentales: se logran autofecundando las plantas por varias generaciones para que todas sus características genéticas sean homocigotas
2. Elección de las líneas parentales: se eligen dos líneas homocigotas, pero genéticamente muy diferentes entre sí. En fitomejoramiento se habla de “capacidad combinatoria”, es decir la capacidad que tienen de complementarse para dar hijos vigorosos
3. Producción de semilla híbrida: en el campo se siembran dos surcos del parental macho (donante de polen) y seis surcos del parental hembra (plantas que producirán la semilla). En el momento de la floración, la línea hembra se despanoja (se le quita la flor masculina) para que no emita polen. Así, solo reciben polen de la línea macho y las mazorcas producidas son híbridas. La cosecha se realiza en mazorcas, que van a las plantas de semillas para ser seleccionadas, procesadas y embolsadas como semilla para la venta.
Solo el 1% de los híbridos probados a campo se transforma en un híbrido comercial.
Híbridos populares en tu plato y tu jardín
Muchos productos con los que tenemos contacto a diario provienen de semillas híbridas. Aquí va un puñado de ejemplos:
• Rosas: las rosas de flores grandes, también llamadas rosas de té, son el resultado del cruzamiento de una rosa trepadora y una rosa perfumada. El híbrido resultante es una planta que florece con profusión, con flores grandes y “perfume de té”.
• Tomates: en el mercado hay muchos híbridos de tomate con mayor tamaño de fruto, coloración diferenciada y mejora calidad.
• Maíz: la mayoría del maíz sembrado en el mundo es híbrido. Entre ellos están las variedades “superdulces” que se usan para la producción de choclos.
Bonus track para saber más. Animales híbridos
Por definición, un híbrido es el resultado del cruzamiento sexual de dos individuos genéticamente diferentes, pero ¿es posible en animales? La respuesta es sí, aunque la mayoría de ellos son estériles.
El híbrido animal más conocido es la mula, procedente del cruzamiento entre una yegua y un burro. Consume menos alimento que los caballos y puede cubrir largas distancias como su madre, pero es más fuerte por lo cual puede transportar cargas pesadas. Una mula puede cargar más de 70 kg y caminar 26 km sin descansar.
Las mulas son realmente creaciones humanas, ya que para lograr la cópula se debe engañar al burro con la presencia de una hembra de su especie o bien debe usarse inseminación artificial.