Acerca de la advertencia de la OMS sobre el consumo de carnes rojas

Las carnes rojas y procesadas constituyen un factor de riesgo más, pero no son causal de cáncer. 

En referencia al informe publicado por el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer, de la OMS, acerca de la evaluación de la carcinogenicidad del consumo de carne roja y carne procesada, el Instituto Nacional del Cáncer (INC), del Ministerio de Salud de la Nación Argentina, plantea que el consumo de estos alimentos constituye un factor de riesgo más, pero no una causa para tener cáncer.

Comer carnes rojas y procesadas no ha sido establecido como una causa directa para contraer cáncer. Consumir cinco porciones al día de frutas y verduras, no fumar ni consumir alcohol y hacer actividad física al menos durante media hora por día, contribuyen a reducir los factores de riesgo para desarrollar algunos tipos de cáncer.

En cuanto al consumo de carnes rojas y cáncer no hay una relación causal demostrada, pero sí hay una asociación. La IARC ha clasificado al consumo de carnes rojas dentro del Grupo 2A, es decir, como probable carcinógeno para los seres humanos. Los agentes que se encuentran incluidos en este grupo aumentan el riesgo de padecer cáncer, pero por sí solos no producen cáncer.

Se estima que los cinco principales riesgos relacionados con el comportamiento y la alimentación son el alto índice de masa corporal, el bajo consumo de frutas y hortalizas, la inactividad física, el consumo de tabaco y la ingesta de alcohol, que originan el 30% de las muertes por cáncer.

Aunque la edad es un factor de riesgo importante, recordamos que el consumo de tabaco es el más importante, ya que causa el 22% de las muertes mundiales por cáncer en general y el 71% de las muertes por cáncer de pulmón.

El proyecto de Carga Global de Enfermedades (OMS) ya había previamente establecido que las dietas ricas en carne roja podrían ser responsables de 50 mil muertes por cáncer al año en todo el mundo.
Estas cifras contrastan con cerca de 1 millón de muertes por cáncer al año en todo el mundo debido al consumo de tabaco, 600 mil por año debido al consumo de alcohol, y más de 200 mil por año debido a la contaminación del aire.

Teniendo en cuenta el grado de las evidencias científicas disponibles, la IARC clasifica a las sustancias y agentes carcinógenos en Grupo 1: carcinógeno conocido o probado para los seres humanos; Grupo 2A: probable carcinógeno para los seres humanos; Grupo 2B: posible carcinógeno para los seres humanos; Grupo 3: no clasificado como carcinógeno para los seres humanos, y Grupo 4: probablemente no carcinógeno para los seres humanos.

Fuente: Instituto Nacional del Cáncer
http://www.msal.gob.ar/inc/index.php